La palabra alquitara es de origen árabe, al-gattara, que significa «la que destila» (s. XV. Edad Media).
La alquitara es hoy el método de destilación artesano tradicional más antiguo que existe; aún se utiliza en zona rural de Galicia, es un sistema —muy lento— de poco rendimiento y cuyo resultado es un aguardiente de alta calidad; la destilación es «gota a gota» y la poesía es «palabra a palabra» —el perfume y el néctar—, que hace que los seres humanos «destilen» sen timientos y pasiones a través del alma y el corazón como en la cruda y natural poesía de Anabel.
La letra de Anabel es reverencia ante la inmensa realidad íntima por la exuberante intensidad de sus reflexiones y pensamientos. Se crean estadios de fotografía poética alcanzando lo perfecto. Es pintada la palabra al detalle afnando el trazado de todos los elementos que fluyen en su hoy puesta en escena de vida y sueño. Ella se convierte en artista fiel de cual magia que se obtiene al crear ese cóctel de letras que en la fragua del lector es hoy libro.
Anabel logra como nadie ajustar el difícil equilibrio de los tiempos.
Jordi Subirá Fumaral