Esta novela condensa y pone de manifiesto las vicisitudes de sus protagonistas, en especial la del arquitecto GONZALO D´SOLAD, que, por no encontrar el verdadero camino para lograr el éxito, pese a que tenía capacidad de sobra para alcanzarlo, buscó una vía alterna que apareció con luces cegadoras y que lo fue haciendo adicto; y cuando le faltó suficiente pasta (billullo, como él le decía al dinero) se convirtió de repente en una mula, como coloquialmente se denomina al porteador de sustancias psicotrópicas; y sin saberlo, al regresar a su terruño sudamericano, a la «SUCURSAL DEL CIELO… LA DE LOS TECHOS ROJOS», no comprendió como su ego modelo, «su tío, el magistrado presidente de la Corte Suprema de Justicia, quien estaba sentenciado secretamente a su eliminación, no física pero sí por medio de la muerte civil», lo ignorara y le sacara el bulto, sin estar al tanto que él (arquitecto), era el mejor y más propicio medio alterno para alcanzar la supresión del magistrado, y en un descuido del joven D´Solad, aun cuando había logrado forjar una estratagema para vencer la trampa ideada por los enemigos de su tío, «conocida de boca de un detective especialista en drogas», y aun cuando dio resultado, no previó nunca otra posible consecuencia y fue detenido, llevado a prisión, al reten JUNQUITAL, después de haber sido vejado y puesto a la orden de un juzgado bajo el poder de las mafias judiciales y de las nuevas TRIBUS apoderadas de la justicia, para que se le condenara a treinta años de presidio sin beneficios alternos.
En el transitar de ese calvario, ya se había casado (ínterin de tres años para dictarle sentencia), siendo además padre de una preciosa criatura, SOFI, lo cual le hizo entender que no había más caminos que: UNO. ESPERAR SER AJUSTICIADO POR CUALQUIER INTERNO PAGADO DE SU MISMA CÁRCEL… DOS. ESCAPARSE EN UNA FORMA TAN ESPECIAL, EXCLUSIVA Y AXIOMÁTICA PARA ALCANZAR SU EFUGIO Y CON ELLO, UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD QUE LE PERMITIERA FORJAR UNA
VERDADERA FAMILIA Y CORONAR SUS ASPIRACIONES… OBTENER UN ROTUNDO ÉXITO».
Las peripecias que rodean todas y cada una de las situaciones presentadas a todos los personajes —con personalidades poliédricas— los hacen extraordinarios, en esta especial y hermosa obra, tanto que vale la pena leerla con atención y bajo una
aguda observación de cada uno de sus capítulos y de sus protagonistas para sacar ¡sus propias conclusiones!