Nacida en Barcelona el 16 de septiembre de 1984, Anabel Marve es la mediana de tres hermanos. Tras una infancia llena de amor e inocencia, pronto descubrió los sinsabores de la vida de la mano de la separación de sus padres, lo que causó una brecha familiar que marcaría a todos de forma irremediable.
Independiente y resuelta, desde muy temprana edad ha trabajado en el mundo de la hostelería, se ha refugiado en el amor y las amistades y ha encontrado en la escritura la terapia idónea para sanar, honrar y ayudar a quienes se sientan identifcados con sus experiencias y aprendizajes.
En esta primera novela autobiográfica, la autora recorre su vida con grandes dosis de emoción y realismo, acercando la tragedia personal de la pérdida de sus padres a causa del cáncer, a todos aquellos que hayan convivido con dicha enfermedad. A través de estos terribles golpes, la escritora y protagonista reflexiona sobre el sentido de la vida, el tiempo y la familia, extrayendo siempre, por difícil que parezca, un mensaje de fortaleza y optimismo que alienta a mantener la esperanza cuando todo parece perdido.