Siempre fui una niña sencilla, con pocas amistades, pero profundamente leal. Durante mi infancia, enfrenté exclusión por ser de etnia gitana, hasta que llegó una nueva compañera al aula y nos volvimos inseparables junto a un mejor amigo. Sin embargo, la vida nos separó con el tiempo.
A los 16 años, comencé a trabajar para ayudar a mi familia y mejorar nuestra situación económica, mientras estudiaba mecánica de coches. Mis padres nos inculcaron valores sólidos, enseñándonos que nuestras raíces no limitaban lo que podíamos lograr.
Como toda adolescente, viví decepciones, amistades traicioneras y relaciones tóxicas, pero aprendí a superar esas experiencias ya a centrarme en mis metas, como obtener el carné de conducir. Aunque no había completado mi graduado escolar, decidí retomarlo en un instituto para adultos. Allí conocí al hombre que seria el padre de mis hijos. Desde nuestra primera cita, supe que él sería la persona con quien formaría una familia. Aunque al principio dudó debido a prejuicios, el amor rompió esas barreras.
Hoy, tras superar desafíos, he formado una familia unida y alcanzado etas importantes, como terminar mis estudios y construir una vida estable. Este libro es uno de mis sueños cumplidos, un reflejo de m i lucha y determinación. Mi historia demuestra que, con amor, esfuerzo y perseverancia, todo es posible.
Es un mensaje de esperanza para quienes buscan superar las adversidades y construir una vida llena de felicidad y propósito.