La línea del tiempo que recorre mi historia me sitúa en el numero 16, indicando mi edad, y también dibujo muy lentamente la creación de mi libro. Desde que mis ojos ya sabían interpretar las letras, me encantaban las historias y leer poemas escritos por el amor; siempre amé ese concepto abstracto, y cada vez que escribía mis cuentos, ese sentimiento envolvía cada parte de ellos —sí, de pequeña, antes de atreverme a enfrentarme a los versos, me encantaba redactar historias de amor en forma de cuentos—. Empecé a escribir poesía cuando comencé mis estudios en la ESO; un maestro de inglés que tuve fue quien me animó a jugar con el arte y los poemas, él siempre ponía en un altar todas las composiciones que le entregaba y decía que llamaban la atención por las palabras tan bellas con las que me expresaba. Podría decirse que esa alma se cruzó en mi camino para que descubriera mi pasión por todo lo relacionado con la poesía. Ernesto, siempre te agradeceré todo lo que creías en mí. Creo que si la vida no hubiera dibujado tu nombre en mi historia, jamás me hubiese atrevido a hacer públicos mis poemas.
Como almas desnudas en busca de amor surge de unos poemas que le dedique al desamor. Quiero contar una historia de amor que solo es real cuando la protagonista besó los labios de Morfeo.