Felicidad Ayala, mujer, madre, padre y artista de lápiz y pincel. Nacida en Granada en 1970, mantuvo su talento oculto durante los años que dedicó a sacar adelante a su familia.
Sin dejar de lado su vena artística, desenfundó la pluma y plasmó sobre papel aquellos fantasmas que invaden días y noches duras. Aquellos fantasmas le darían el impulso para un día sacar a la luz y compartir el fruto de su talento. Historias, relatos estremecedores, a veces, esperanzadores, entre tanto, intrigantes, pero sátiros en su ser, nos llegan encuadernados.
Dando su primer paso con Cuentos del abuelo, emprendería camino, regalándonos más tarde su poemario más íntimo: Margaritas para los cerdos y, en antesala de este, su penúltima obra: Lo que callan las calles, publicada bajo seudónimo, haciendo honor a la esencia del relato.
Felicidad Ayala, cuyo nombre y murales dan vida a un magnífco rincón dedicado a la inmersión lectora, la biblioteca del CEIP SAN ANDRÉS, su colegio de la infancia, donde docentes y discentes han rendido honor en su reconocimiento.
Hoy nos presenta su nuevo libro, Si muriera antes de despertar, una obra que nos lleva por la invisible y latente línea entre vida, muerte y limbo.