Hilario Martínez Morales nació en Jarandilla de la Vera el año 1950, donde ha vivido casi siempre. Habiendo estudiado primero en la escuela pública y luego en el instituto de los Hermanos Maristas del
pueblo, aprendió casi tanto de los estudios como de la vida misma, siendo en gran medida un autodidacta, lo que le convirtió en una persona de trato afable, campechano y amigo de sus amigos.
Desde muy pequeño sintió el deseo y la inspiración de los artistas, por eso aprendió a tocar la guitarra eléctrica, formando parte de un grupo que recorrió miles de kilómetros alegrando a la juventud de la
época “yeyé”, pero el alma de artista no se detiene y una vez terminada esa etapa,
se dedica en sus ratos libres a componer poemas que, con la ayuda del ayuntamiento, plasma en azulejos en varias zonas del pueblo, poemas que casi todos los vecinos se saben de memoria. Ahora,
cuando sale a la luz este libro, su vocación ha cambiado a la faceta de pintor, siendo su desinterés tan evidente que ha regalado cuadros a muchos de sus amigos repartidos por la geografía de toda España.