(natural de Asegur, localidad cacereña perteneciente a la comarca de Las Hurdes) no es un escritor a tiempo completo: imparte clases de Lengua y Literatura; toca la guitarra y canta en el grupo Restrallíos. Hace varios años publicó Rehén
de la experiencia, un libro de poemas. A la vez que surgían los poemas, el autor también empezó a escribir historias, que nacían de su imaginación o que recreaba a partir de narraciones orales que le contaban. Cuando escribe lo hace rodeado
de silencio y música, de soledad y acompañado de las voces de los personajes y con una intensidad arrebatadora.
Suele dejar enfriar las historias para volver tiempo después y llevar a cabo la labor limae, sin matar el espíritu con el que se compuso el cuento. Así que, como cualquier artista, aunque parezca que no está trabajando, está al acecho de una
palabra, de una historia, de un sentimiento o de una melodía que sea el principio, el centro o el final de una nueva composición.