Nacido en Valencia (España), a sus 57 peldaños de vida publica su primer libro de cuentos de auto-ficción, Mejor que muerto, tras su anterior poemario, titulado Latidos Muertos.
Comenzar a contar una historia es tan arriesgado como descolgar un cuadro sin saber dónde lo volverás a colgar. Estás convencido de que no está bien situado y necesitas seguir contemplándolo, pero desde otro ángulo. Debes ponerte en movimiento. El cuadro, una vez descolgado, en el único sitio donde nunca debe quedarse es donde estaba.
Todos estos cuentos se han escrito desde mi ángulo imaginario, que podría ser tan real como ficticio, tal como mi memoria los desea percibir, quedando así al libre albedrío la imaginación de cada uno. Así pues, cada lector podrá verse identificado en ellos en algún momento de su vida. Nuestra imaginación tiene el poder de transformar cualquier tiempo pasado, presente e incluso futuro, y la literatura, la capacidad de hacerte vivir la realidad a tu imagen soñada.