Yolanda tuvo desde niña una mala relación con la comida: comía sin necesidad de apetito y no se saciaba.
Tras someterse, a sus 40 años, a una dieta de batidos de proteínas con la que bajó 45 kilos, su desorden alimentario se desató, dando lugar a importantes episodios compulsivos
en los que se daba grandes atracones de comida. “Soy como una bulímica, pero no vomito” lo describía, sin entender muy bien lo que le sucedía.
Abrió una web y un perfil en redes sociales, como Vivirparacomer, que hoy cuentan con miles de seguidores y fue la primera persona en España en confesar su trastorno a cara descubierta en Internet y en televisión.
Trabajó durante dos años para recuperarse sin ayuda de su trastorno alimentario. Más tarde se formó con un curso de especialista universitario en Coaching, Inteligencia Emocional y Programación neurolingüística y diversos cursos sobre trastornos alimentarios y ahora se dedica al coaching personal y nutricional, generalmente por Skype, y acompaña a personas de cualquier parte del mundo a mejorar su relación con la comida, lograr sus objetivos y tener una vida más feliz.