Muchas veces he coincidido con Juan Antón en diferentes acontecimientos balonmanísticos, y siempre hablamos de reglas y de arbitraje, así como de otros aspectos relacionados con la evolución de nuestro querido deporte. Pero también en la distancia (a través del móvil o correo electrónico), o leyendo cada uno los trabajos del otro. Pienso que entrenadores y árbitros deben cooperar juntos en la búsqueda de las mejores reglas para nuestro deporte, para hacerlo más atractivo a ojos de la audiencia, los medios, los sponsors y los niños. Mejor cuando ambos están lejos del terreno de juego, para que las emociones y la presión no desvirtúe lo que debiera ser una buena relación deportiva. Hace años que aconsejo a los árbitros -que no obligo- que conozcan cuanto más y mejor el juego, que acudan a congresos de entrenadores, tomen asiento en la última fila y escuchen. Les irá mejor en su trabajo como árbitros. Me aplico el cuento y más de una vez Juan ha tenido que explicarme las diferencias entre los sistemas 5:1 y 5:0+1, el 4:2 y el 4:1+1. A cambio Juan ha pedido mi opinión sobre temas que le preocupan como las faltas señaladas al pivote por supuestos bloqueos antirreglamentarios cuando a cambio es objeto de auténticas barbaridades, o cómo seguir avanzando en todo lo relacionado con el Juego Pasivo, las acciones del tipo llamado “Hollywood” o los diferentes criterios relacionados con las faltas del atacante, entre otros. En esta incansable labor divulgadora de Juan Antón este libro constituye el cuarto volumen de esta colección de Innovaciones y contribuciones para la evolución del juego que publica en los últimos 4 años. Tal parece que Juan posea una extensa bibliografía que nunca se acaba, tampoco sus conocimientos ni sus ganas de escribir, que sea por mucho tiempo.