Cicatrices mágicas simboliza el largo caminar de cualquier ser humano, desde que nace hasta que muere. Son todas esas experiencias vividas, contadas e incluso soñadas por cada uno de nosotros.
Todas ellas forjan nuestra personalidad, nuestro carácter. Cada experiencia nos marca para bien o para mal. Es lo grandioso de esta vivencia, de este aprendizaje.
Lo bonito de esta vida son esas cicatrices que mostramos, que con el paso del tiempo se van curando, se van cerrando. Cada una de ellas la hacemos nuestra, formando parte de cada recodo de nuestro corazón, de nuestra alma.
Una vez acabado el proceso de asimilación y aceptación de las mismas, nos sentimos orgullosos porque se han convertido en mágicas.
Poseen la magia del aprendizaje, nos enseñan por dónde debemos ir, en quién debemos confiar y cuál es el camino a seguir. Debemos saber mostrarlas al mundo y aprender a convivir con ellas, por ello te pregunto: ¿te atreves a enseñármelas?