En el libro que tienen entre sus manos se recogen situaciones vividas, leídas o analizadas desde el año 2017 hasta el verano de 2020. Todas tienen algo en común: hablan de comunicación. Hoy en día todo comunica y todos a todas horas comunicamos. Estamos viviendo la ebullición de un cambio de hábitos jamás visto y que nos pone ante un espejo que no refleja la misma imagen que nosotros queremos proyectar. Si no comunicamos adecuadamente, será difícil controlar nuestra imagen, nuestra credibilidad o nuestra reputación.
La búsqueda de la verdad y de la fiabilidad serán seguramente los grandes retos —ya lo son, de hecho— a los que nos enfrentamos toda la sociedad en general. Estamos más expuestos que nunca. Hoy, nuestra reputación y nuestra imagen están siendo cuestionados permanentemente.
Los antiguos buscadores de Oro decían que «un hombre sin espíritu es un hombre derrotado». Y yo les digo que una empresa sin comunicación es una empresa derrotada. ¡Elijan en qué lado quieren estar!