Alain es hijo del delirio de Roseline de Milly, miembro de la aristocracia rural francesa simpatizante del Partido Comunista francés, que abandona su brillante futuro para dedicarse a una tesis sobre Edgar Allan Poe y se traslada a Charlottesville, sede de la Universidad de Virginia. En una borrachera, en la propia cama que ocupó el escritor durante un semestre, se produjo la concepción, proveniente de padre desconocido. Es un hijo no deseado, que aprende a hablar, a leer y a pensar en francés y por tanto, no es “buen americano”.
Alain hereda el delirio, un alejamiento del conservadurismo virginiano y desarrolla una pasión por el teatro y por las técnicas teatrales tan fecundas en los 50 y 60 del siglo pasado. Con 16 años tiene que abandonar Charlottesville y se traslada a New- York city, donde intenta ser actor, de los del Actors Studio, a principios de los 60. Su parecido con Pat Dunn, personaje que interpretó Reagan en Cowboy from brooklyn le hace caer en las redes del entonces poderoso presidente del sindicato de actores USA, quien lo utiliza en negro, para un estudio de recepción de las conferencias que pronuncia el futuro presidente en las sedes de la General Electric.
La eficacia de Alain se sustenta en su gran conocimiento de las técnicas del actor y resulta una herramienta indispensable para un personaje que inicia su paso del Partido Demócrata, al Partido Republicano.
Siempre en negro, Alain será instrumento de Reagan y de los sucesivos presidentes USA hasta Georges Bush junior, quien lo cede a Cecilia Sarkozy al principio de la presidencia del marido de ésta. Finalmente, Alain es recuperado por Clinton, para las primarias presidenciales de Hillary.
El mérito de Alain es el “Discurso de la arrogancia”, técnica de manipulación mediática que perdura desde entonces. Así triunfó Reagan, cuyo acceso a la Casa Blanca es relatado con detalle. Es una época plagada de escándalos y de asesinatos. Asimismo, las presidencias de Bush junior y de Sarkozy son objetos privilegiados.