A partir de una visión panorámica sobre las humillaciones, desgracias y muertes que afectaron a la gran mayoría de estamentos de la sociedad española con ocasión de la invasión de las tropas napoleónicas en 1808, el autor, desde una perspectiva seria y crítica, se va adentrando en la descripción y análisis de una serie de aspectos relativos a la situación social, política y económica por la que en esos momentos transcurre la vida de los vecinos de la villa de Candeleda (Ávila), que, sin haber sufrido los embates más amargos de la guerra, sí vieron comprometidas su economía doméstica, su tranquilidad personal y familiar, y su honorabilidad.
Todo ello se articula y desarrolla en base a la información que se ha extraído de las fuentes generales consultadas y en particular de la contenida en un legajo conservado en el Archivo de la Real Chancillería de Valladolid que contiene el sumario que se sustanció contra Bruno Castañar y González, alcalde constitucional de Candeleda en el tiempo en que un destacamento francés estuvo acantonado en dicha población.
En resumen, se trata de una obra amable y entretenida, en parte porque el autor, con independencia de ofrecer innumerables datos y referencias, la salpica de un amplio anecdotario que hace más llevadera la narración que, además, tiene una clara intención didáctica.