He visto lo que hay más allá, en el Vacío. Destruí una ciudad sin querer. Creé un universo, también sin querer. He conquistado mundos pestañeando. He despedazado galaxias con mis manos. Me hice compañero de la criatura más peligrosa de esta creación, sin saberlo. Salvé a todo un panteón de dioses, mi familia, de aquello que más temíamos y que, por desgracia, al final… bueno, ¿y si lo dejamos para más tarde? Después de todo ya sabéis quien soy, pues tengo muchos nombres, pero solo uno permanece. Y esta no es la historia que parece.