Este libro es una memoria de la trayectoria de uno de los primeros conjuntos musicales de la Barcelona de los años sesenta del siglo pasado: Estrellas Fugaces. Situándola en el contexto social y político y trazando un retrato de la juventud de posguerra, ávida de acciones que les hiciera bullir la sangre en un tiempo gris, la historia de este grupo nace y crece gracias a un vehículo colectivo principal: la música, que abrió las puertas de un futuro posible, libre y creativo.
Estrellas Fugaces contribuyeron, con su música, a mostrar ese camino que reclamaban los adolescentes entre 1958 y 1966. No fue un grupo importante en el panorama sonoro, pero su aceptación fue general desde sus principios. Sin estas notas, que ha reunido Carlos Romagosa, componente del grupo, sesenta años después, con toda seguridad este pedazo de historia hubiera desaparecido en el olvido.