Esta obra, ahora reeditada, fue acabada de escribir en 1986 y publicada tres años más tarde. Con una tirada en aquella ocasión de quinientos ejemplares, mereció el favor de los lectores hasta el punto que en el verano siguiente a su publicación fue el libro de tema local más vendido en las librerías jerezanas. En ella el autor dirige sus cartas a una jerezana que, en los difíciles años cuarenta del pasado siglo XX, marchó con su pequeña hija a Cataluña estableciendo allí su vida y su familia olvidando sus raíces. A través de sus capítulos, el lector tendrá ocasión de revivir la esperanzada época de los ochenta, cuando la ciudad de Jerez comienza a salir de su letargo ancestral para encarar con fuerza el no muy lejano siglo XXI, y ello debido a las grandes transformaciones urbanas, así como otros muchos aspectos que se sucedieron por aquella década. No olvida el autor evocar a través de una bella prosa aquel otro Jerez de antaño que en su juventud conociera la destinataria de estas cartas: su gente, sus barrios, sus costumbres, sus paisajes, sus tradiciones o sus fiestas.