El presente trabajo muestra un itinerario vital que, a partir de una profunda autocrítica, plantea en primer lugar la necesidad de abandonar toda impostura (de ahí el título de la obra) para buscar la coherencia y la aceptación de la propia realidad como ser humano para, a continuación, plantearse el significado de ser en el tiempo. El desarrollo de esa cuestión aparece en la segunda parte, “Entre el Ser y la Nada”, la diferencia entre existir y ser. Por qué no es lo mismo un segundo que un instante, tiempo espacializado (tempus) o tiempo espiritual (aevum). ¿Y al final…? La tercera parte del libro hace un esbozo de respuesta ya que esa cuestión está aún en construcción. Dice la lógica que la nada es el final de todo lo humano, pero se plantea el amor como alternativa, como una fuerza real que abarca el universo. Que se manifiesta de muy diversas formas y es capaz de transformar y rescatar lo humano, creando vida donde solo hay vacío.