En un contexto de incertidumbre, como es el actual, este libro aporta una revisión ordenada de lo que es esencial en educación infantil. Es una reivindicación de la importancia de los tres primeros años de vida, su peculiaridad y extrema riqueza y una invitación constante a disfrutar del privilegio de acompañar a los niños y niñas en este periodo. El título hace referencia al camino de ida y vuelta que supone todo proceso de aprendizaje: educando nos educamos; enseñando, aprendemos. Y aprendemos todos los días cuando no perdemos la capacidad de asombro ante las niñas y los niños, que para el autor es esencial.