La novela transcurre entre Barcelona y Paris durante la época de los años 60, y sus personajes están narrados en forma omnisciente.
Don Julio, el médico del pueblo, una tarde de invierno invadido por el cansancio y la nostalgia, se dispone a desenmascarar los recuerdos de un pasado difícil para poder recuperar su propia identidad familiar.
Julio desciende de una familia de inmigrantes castellanos con pocos recursos económicos, que intenta adaptarse e integrarse a la vida diaria de una ciudad como Barcelona.
La tragedia familiar llega cuando uno de los miembros de esta humilde familia, su hermano Fernando, deja embarazada a una joven estudiante de la burguesía catalana. La gran diferencia de clases sociales provocará una serie de conflictos muy graves que convertirá las vidas de ambas familias en una auténtica pesadilla.