Este libro es solo uno de los pequeños pedazos del alma torturada de un hombre al que la vida, aquella a la que él tanto amaba y disfrutaba, intentó arrebatarle todo de la noche a la mañana. Este pedazo de alma al que aquel gran hombre ha querido darle vida mediante el uso de su pluma y su corazón herido.
Relata los pensamientos, recuerdos, sentimientos e historias que su mente revive, una y otra vez, cada noche de insomnio que suma venciendo al dolor, esperando que llegue un nuevo día.
Este pedacito de aquella persona no solo ha sido un claro de luz tras un mar de sentimientos y pensamientos de oscuridad, sino un intento de sacar de su mismo corazón un pequeño salvavidas para poder demostrar que tocar fondo no significa estar hundido.
Durante el desarrollo de este manuscrito se representa aquel «yin yang» que tenemos todos interno, pero que cobra una importancia superlativa en situaciones extremas, como es el caso de la enfermedad sufrida por el autor de este libro. Situación que lo ha llevado a ver las millones de caras que tiene la vida y a intentar luchar contra ellas buscando el bienestar propio y, sobre todo, el de su entorno.
Superación, pensamientos oscuros, ira, amistad, amor… son solo peque-ñas pinceladas de los muchos temas que bailaban en la mente de aquel hombre, mientras el dolor se apoderaba de él cada vez que llegaba la noche, y han cobrado vida en esta entrega.
Como pequeña reflexión… «La vida es un continuo aprendizaje…, que nada ni nadie te quite las ganas de seguir aprendiendo».