Fermín Wert es un profesor de Filosofía obsesionado con la muerte. No tiene trabajo. Ni autoestima. Y, por si fuera poco, su novia acaba de dejarlo y se ve obligado a irse a vivir al piso de Estoico, un individuo bastante peculiar. Ya solo le queda una esperanza en la vida: volver a enamorase. Cuanto antes.