En este libro, Francisco Díaz Portillo traslada su enfoque desde lo deportivo hacia lo emocional. Nos introduce en el mundo de la reflexión y la meditación. En la actualidad, todo parece suceder con mayor rapidez, y el estrés, la ansiedad y la depresión se han convertido en un castigo de este siglo. Encontrar la paz interior se convierte en una necesidad para descubrir que somos parte de este universo, que solo vivimos una vez y que cada minuto que malgastamos equivale a un tiempo que perdemos de estar aquí. Debemos enfocar tanto la mente como el cuerpo. Si somos capaces de entrenar nuestro cuerpo, ¿por qué no hacer lo mismo con nuestra mente? La vida está ahí, no debemos culparla de nuestros males. Debemos aprender de ella y disfrutar de nuestra propia vida. Entonces, veremos cómo este enfoque lo proyectamos hacia los demás.