La novela corta muestra su esencia cuando es capaz de transmitir mucho con muy poco.
Elena es un excelente prototipo de este género literario, pues logra cautivar al lector desde su inicio e invitarlo a terminar la lectura lo antes posible, ya que la curiosidad y la ansiedad por conocer el desenlace se apoderará de él o ella irremediablemente desde el primer capítulo.
Alexa Williams realizó en este texto una narrativa fácil, fluida, impactante y estremecedora, en la que en cada breve capítulo se encierra toda una trama, y nos deja con la necesidad de continuar leyendo.
Más que datos, hechos o circunstancias sobre la Segunda Guerra Mundial, la historia de Elena se concentra en transmitir los sentimientos que un ser humano experimenta cuando su mundo deja de existir y cuando debe, como en un lienzo, pintarlo de otro color para intentar sobrevivir.
Elena, una novela de valentía y lucha contada vertiginosamente, te estremecerá.