En un pequeño pueblo, al norte de Rumanía, vivía una niña de ocho años feliz al lado de su familia. Pero, por circunstancias de la vida, su madre se vio obligada a dar a todos sus hijos en adopción. Cuando menos se lo esperaba, se vio sola en un orfanato con sus dos hermanos pequeños y sin saber dónde estaban sus otras hermanas.
Al pasar un año, una familia de España adoptó a los tres, pero ella no se esperaba que esa familia no sería como imaginaba.
Así que decidió ir en busca de su familia biológica para encontrar respuestas.