En tierra de alguien nace con vocación de ser un canto vital.
El recuerdo y el olvido: dos de las muchas caras que la vida nos muestra.
Arranca el texto con un poemario. En él, Jesús A. Peñas nos habla de cuestiones que conforman nuestra existencia y que, por muy antiguas que resulten, no logra deslucir la pátina del tiempo: el amor y el deseo, el correr del tiempo, el dolor de las ausencias, la belleza en su más amplio sentido…
Una serie de relatos constituyen la segunda parte. El autor se convierte aquí en observador de la sociedad y reflexiona sobre las relaciones humanas en diferentes épocas y distintos ámbitos. Queda patente en algunos de los relatos una crítica hacia comportamientos o actitudes que, por su cotidianeidad, a veces nos pasan desapercibidos.
En el libro se respira un ambiente intimista, se busca el acercamiento al lector y su complicidad mediante la empatía con los sentimientos y la sencillez del lenguaje.