«…Por último, este libro se lo dedicamos al mismo Georg Bachmayer. Al austríaco acomplejado, zapatero repudiado en silencio por su aspecto físico. Al que pronto le embriagó la locura del nazismo, que le permitió encarnar a Lucifer, y serlo. Se lo dedicamos al Bachmayer, que, a las órdenes de exterminio de Heydrich, añadió de su cosecha dosis ingentes de crueldad extra, caprichosa y absolutamente desproporcionada en su forma de entender la extrema mano dura con la derecha o con la izquierda. A ese ser que daba rienda suelta a una locura de sadismo insaciable cada día con explosiones de temperamento primitivo de ira y salvajismo. Al capitán Bachmayer, que quedó marcado con terrorífico recuerdo para siempre de los presos que sobrevivían, le dedicamos el libro. A Georg Bachmayer (1913-2008), oficial de las SS con el grado de Hauptsturmführer, capitán, que fue lugarteniente de Franz Ziereis en Mauthausen (1940-1945) y comandante del campo satélite de Ebensee (1943-1944). A Georg Bachmayer, que murió en 2008 en Valencia con casi 95 años, solo doce años antes de que lo descubriéramos y sacáramos a la luz».