El libro hace un análisis crítico de los estereotipos, mitos y falsas creencias sobre la vejez y, sobre todo, sobre las mujeres viejas, que la sociedad patriarcal y machista ha elaborado a lo largo de los siglos.
Estos estereotipos y mitos devalúan a las viejas y dificultan que las mujeres viejas puedan tener una vida satisfactoria y activa, desarrollando proyectos y experimentando vivencias gratificantes sin disimular su edad.
También denuncia la sobrevaloración de la juventud, que deriva en un mito: «La juvenilitis», que proporciona un enorme negocio a las empresas cosméticas, farmacéuticas y a la cirugía estética, por el deseo inducido por la propaganda y la ideología machista de querer parecer jóvenes. Este mito va acompañado de la devaluación de la vejez en la mujeres y también está relacionado con el mito de la belleza en las mujeres. El canon de belleza es externo a las mujeres y constituye una tiranía y un enorme sufrimiento, sobre todo en las mujeres viejas. Se plantea la necesidad de una nueva narrativa sobre la imagen de las mujeres viejas y la creación de un nuevo canon de belleza en esta etapa de la vida.
Por otro lado, hace hincapié en la ideología puritana y machista que reprime los deseos sexuales en esta etapa de la vida de las mujeres, y aporta información sobre el beneficio de la práctica sexual en la vejez.
Y, por último, invita a las mujeres viejas a reconocer su situación sin disfraces ni artilugios. Aceptar la propia imagen y aprender a disfrutar sin parecer joven.