Aquí la ironía y la ira. Los paisajes corroídos del desánimo. Lo desde entonces deshidratado. Intento, mecánicamente dificultoso, de expresión libre. La sal. El recado insólito, el mensaje de abatimiento, la palabra ácida. Así es la tentativa de avanzar o retroceder, a un tiempo, de la quemadura. La espera recelosa de la aceptación convive con un inexplicable creciente aprecio de la necesidad de pedir y de dar, consciencia de sentirse frágil. Fracturas, molestias cervicales, placa de titanio: secuelas del accidente. Una maniobra vital creativa para la desmemoria. Unos deseos que se han visto frustrados. Una vida que se detiene. Circunstancial mientras. Casi como un reflejo, un empuje subjetivo íntimo. Los lugares deshabitados. Los colores de otoño. La luz de fondo de las poblaciones de pescadores que se reúnen. El olor del mar.