Esta historia es real, no es una novela de ficción, y los hechos que se relatan no están distorsionados para hacer menos dura esta verdad incómoda, incluso para la sociedad de este siglo XXI.
Este libro recoge mi vida junto a un maltratador, no solo físico, sino psicológico, durante dieciséis años de matrimonio. La pesadilla no termina cuando te separas de él, pues ahí comienza la segunda parte de la larga lucha que todavía hoy mantengo con los tribunales por una sentencia justa y digna, tanto para mí como para mi hija.
Todo comenzó en 1986, cuando le conocí y me casé enamorada. Tuve a mi hija y era feliz. Sin embargo, un día me di cuenta de que estaba en una telaraña de la que no sabía salir.
La pregunta que siempre te hacen es: ¿por qué aguantaste tanto? Por miedo. Simplemente por miedo.
Somos seres humanos y lo que para unos es una cosa normal, para otros puede ser el fin de su mundo… ¿Cómo se puede juzgar a alguien por ser persona?, ¿cómo se puede delimitar el miedo?, ¿alguien es capaz de medirlo?