Sofía narra a su nieto Anjali toda una vida de amor unida de la mano de una gran sensibilidad y sentimentalismo, envuelto de un gran halo soñador y rodeado de una gran dosis de chispa y magia. Tanto Sofía como su hija Casandra extrajeron lo mejor de la vida entre España y la India: Asturias, y su paraíso natural, y Jaipur, ciudad rosada y mágica, ambas con sus dos grandes amores, Pelayo y Yamir. Y Anjali, tremendamente sensible, romántico, con grandes valores inculcados por su abuela, le transmite su gran pasión por la vida, rociándole e impregnándole de su gran paz interior. Anjali se instala en España y trabaja como bailarín y coreógrafo, allí conoce a su gran amor David, enamorándose de él. Viven en primera persona con pasión los entresijos, vericuetos, recuerdos y vivencias maravillosas narradas tantas veces por su abuela. Anjali finalizó el libro favorito de su abuela: Inmersa en la luna.