Adam y Evelyn, una misteriosa pareja que una extraña noche amanece en una isla desierta a la que apodarían Insomnia. Yan, el hijo de estos, crecerá en esa isla con el resto de afortunados que habitan en ella, pues en Insomnia todo es perfecto. Los pocos habitantes viven en felicidad en un locus amoenus, donde la enfermedad, la muerte y la maldad no forman parte de ese paraíso idílico de flora y fauna sin igual…
Sin embargo, las emociones de los más jóvenes pueden alterar el equilibrio de Insomnia, como sucedió aquel día de la Gran Tormenta debido en particular a una fruta prohibida, la fruta estrella.
Quien ose desafiar a la isla protegida por el templo de los 12 Sabios y alterar el destino de esta se arriesga a ser desterrado, lo que significaría volver a un mundo real e imperfecto, tal y como lo conocemos hoy en día.
El destino de Yan y sus amigos está escrito, cada decisión es irreversible, desde escoger una simple pulsera hasta aventurarse en un romance con la persona equivocada conllevará determinadas consecuencias.
En el camino, un misterioso personaje parece alertar a Yan en determinadas ocasiones, ¿cuál es su devoción, un simple mensajero del destino?
Destino, amor, realidad y fantasía se juntan en la primera entrega de una trilogía escrita por el autor Borja Bastías.