«Hay historias que nacen de la luz, y otras que emergen de la oscuridad. Esta es la mía.»
¿Cuántas veces has pensado en desaparecer de la faz de la tierra? ¿Cuántas veces te has dormido llorando sin querer despertar a la mañana siguiente? ¿Cuántas mañanas has deseado que la vida acabase de una vez por todas?
Así viví yo durante años, en un inmenso agujero de sufrimiento y desesperación.
Hasta el día que todas esas preguntas se convirtieron en mi única ambición: desaparecer y dejar de sufrir. En medio del dolor, descubrí que la vulnerabilidad puede ser nuestra mayor fortaleza.
La chica que se tiró no es solo mi historia; es un eco de las luchas silenciosas que enfrentan tantas personas,
Este libro es un faro para quienes han sentido que la oscuridad los consume y una prueba de que, incluso cuando todo parece perdido, siempre hay un camino de regreso a la vida. Es un homenaje a aquellos que luchan en soledad, un recordatorio de que incluso las caídas pueden ser el comienzo de un renacer.