Aquel pato blanco
(Historia real)
«Le até una piola en la pata
al pato que tenés que matar»,
me dijo mi madre
y se fue a trabajar.
Al llegar la hora
afilé el cuchillo,
cogí aquel pato,
pero el pato habló.
Habló con palabras,
le vi y le oí.
Sé que no estoy loca,
sé que el pato habló.
No quería morir,
no debía morir.
Lo solté y maté a otro,
total…, no se notará.
Al llegar mamá
no supe mentir,
no pude mentir,
se enfadó conmigo.
Me obligó a matar
aquel pato blanco
que no quería morir,
que no debía morir.
Botón de compra para España (derecha)
Botón de compra para Latinoamérica (izquierda)