Este pequeño libro alberga algunas composiciones que encierran lo sentido por mí en estos momentos, donde fluctúan, tal vez, sentimientos oprimidos en lo más recóndito del alma, queriendo expandirse hacia el mundo exterior.

En la vida, una misma realidad puede ser concebida de diferente manera por personas que la contemplan al mismo tiempo en el mismo lugar y bajo las mismas circunstancias. Por todo ello, no tengo la menor duda de que mis versos serán enjuiciados de muy distinta forma, ya que no soy yo quien debe juzgar mi obra.

Sus páginas contemplan de forma subrepticia la reflexión existencial, ahondando de manera subjetiva en las relaciones humanas y los sentimientos.

Se hace especial hincapié en el concepto del yo, en su propio nacimiento, donde las emociones inherentes son cautivadas bajo los encantos mágicos con latidos de sensibilidad germinados a partir de un espíritu damnificado.

Se trata de un hoy con claros vestigios de un ayer, ambos conjugados bajo vertiginosos momentos que derivan en el quebranto brutal de un yo, quedando como un barco a la deriva sobre un mar desvanecido de imágenes idealizadas, de sueños insospechados, de ilusiones ofuscadas, buscando incesantemente el componente esencial del amor y del propio ser, lo que determina el yo innato y lo que nos hace realmente únicos.