Solo fueron dos meses, pero aquellos dos meses del año 2020 cambiaron el mundo. Súbitamente, todos los escenarios posibles se transformaron por la irrupción de una grave pandemia: sistemas sanitarios de muchos países que colapsaron por el tsunami que supuso la irrupción del coronavirus y por las no pocas veces improvisada gestión política de una situación sin precedentes que también cambiaba por segundos, imposibilidad de conocer lo ocurrido por la infinidad de fake news de uno y otro signo que aparecían a diario, ausencia de material sanitario y de test que facilitaran el distingo entre personas asintomáticas, contagiadas, inmunizadas y libres de virus que permitiera la adecuada gestión de la movilidad de la población con ausencia de riesgos, extinción de muchos de nuestros mayores en residencias de ancianos que fueron escenarios especialmente afectados por el virus, trabajo incansable y sin la protección adecuada de un personal sanitario y geriatra que, en una proporción escalofriante, también llegó a perder la vida en la lucha contra la Covid19, así como de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, profesionales del transporte, reposición y de otros sectores que también enfermaron y fallecieron en el ejercicio de su trabajo… Para superar aquellos traumas seguramente querremos olvidar, pero estas líneas recordarán para siempre la sobrecarga de todo y de todos, la utilización de pabellones feriales para la construcción en tiempo récord de hospitales especializados o –y por muy difícil que nos resulte creerlo- hasta la habilitación de centros de ocio como morgues improvisadas. También servirán para recordar las mentiras, las luchas políticas y el terror de una población que vivió un perenne miedo al contagio y a los sucesivos rebrotes del virus, con sus nuevos decesos y confinamientos, directamente proporcionales a la ausencia de movimiento económico, crisis en todos los sectores, ruina, desempleo y un extraño equilibrio entre ERTES y ERES. Nuestras vidas cambiaron radicalmente, en base a una “nueva normalidad” difícil de digerir porque las consecuencias de la Covid19 fueron de todo menos normales, sobre todo debido a la terrible crisis económica surgida de la pandemia y a la crisis sanitaria y social que se derivó de todo aquello, con los recursos bajo cero, profesionales fallecidos, enfermos y exhaustos, infinidad de personas con secuelas físicas y también miles de ciudadanos de a pie que necesitaron ayuda psicológica como consecuencia de la Covid19.Fue “La primera gran pandemia del tercer milenio”. Ocurrió de verdad y las páginas de este ensayo siempre podrán ayudar a no repetir los mismos errores, si en cierta manera sirven para recordar aquel bisiesto inolvidable…
Biografía:
Rosa Peñasco
(Medalla de las Letras «Juan Alcaide», 2019)
www.rosapeñasco.com
Rosa Peñasco ha escrito novelas policíacas como Ángeles en el laberinto (Editorial Pie de Página, 2016), eróticas como La insumisa insumisa (premio Novela «Ciudad de Irún», 2006, reeditada por Suma de Letras, 2008-2017) y otras que aún están inéditas como En busca de mí por el Camino de Santiago, Siete vidas para un alma, Campus de minas y Diecisiete cartas para Lukas.
Es coautora del guion de cine Yo por asesina paso, pero por loca ni hablar y autora del corto seleccionado por la CCAA de Madrid: RIP, RIP, RIP, ¡Hurra! (2009). Escribió la biografía Doce balas en el alma y la autobiografía Mi madre-niña: un viaje al corazón del alzhéimer (Círculo Rojo, 2019 y 2013), que dio lugar al proyecto Alzhéimer Solidario y a líneas de investigación hoy vigentes en la Universidad.
Como profesora titular de universidad (UNED), además de elaborar material multimedia, siempre ha tendido puentes entre el mundo del arte y de la universidad con ensayos que destilan humor, creatividad e integración, tales como La copla sabe de leyes (UNED, 2018), El testamento ológrafo otorgado por personas que escriben con la boca o con el pie (Dykinson, 2018), Dimensiones éticas y jurídicas de la manipulación genética (Delta, 2010), La accesión y el cambio climático (ECU, 2009), Mobbing en la Universidad (Adhara, 2005) y los aun inéditos: El misterioso caso del humor manchego y UniversalizArte: el Arte en la Universidad como medio terapéutico y docente.
Ha escrito artículos como Con mi gran sentido del thumor (viral, 2017) y cuentos como El corazón no sabe matemáticas (BAM, 2001) y No hay yo sin tú (Primer Premio en el certamen Internacional «Mas cuento que Calleja», 2007).
Con InTeresa, siete moradas, siete chacras y energía kundalini en Teresa de Jesús ve la luz su primer libro de poesía mística, de otros aún inéditos como Fragmentos de eternidad, Loca espiral de milagros en galaxias, seres y átomos y En el odio no hay destino.