La Sociedad Egiptológica de Londres fue fundada en 1887, gracias a la filantropía de la familia Barrymore y a su interés por la historia y el arte egipcio. Lord Barrymore estuvo dedicado a organizar, desde hacía quince años, todas las excavaciones arqueológicas a ambos lados de El Nilo, lo que produjo un directo enfrentamiento tanto con la Sociedad para la Exploración de Egipto, como con el departamento egiptológico del Museo Británico.
En 1927, sir Charles Brewman, miembro de la Sociedad Egiptológica de Londres, viaja a El Cairo junto a su familia para dirigir una excavación en busca de la tumba perdida de la reina Nefertiti. En el transcurso de la expedición, se encontrará con quien fuera su amigo, Harry Knef, un importante hombre de negocios dedicado principalmente al tráfico de antigüedades en el mercado negro. Ambos enfrentados, desde años atrás, por un suceso que quedó oculto en el Valle de los Reyes y en el que las intrigas y la codicia desvelarán los secretos guardados por el cofre de Almiftahin.