El que nace Poeta muere Poema, así vivo yo cada palabra sentida y escrita en este mi primer libro, yo nazco y muero en cada verso, porque cada verso es una parte de mí que sueña ser recordada, cada verso se pierde en una rima imposible, como imposible fueron los momentos que describo y siento, cada verso lleva nombre de mujer, porque no hay poema sin mujer, como no hay mar sin orilla… Como alguien decía “La poesía no es de quien la escribe, la Poesía es de quien la necesita” por todo ello recomiendo que vayan abriendo de par en par las ventanas de sus vivencias y tiriten de frío al comprobar que cada poema de este libro podría haber estado escrito por uno de ustedes. Ahora permítanme, antes de que me alcancen las piedras de mis perseguidores, antes que otros mundos, otros versos y otras historias me despedacen; permítanme aún cuando no es habitual oír hablar al poeta, que os haga una pregunta.
Me atrevo a hacerlo porque soy yo, en cierto modo, el personaje principal de este libro, y por tanto, os ruego que no lo toméis a mal y recapacitéis en vuestras conciencias, mientras yo muero sin pena ni gloria en las manos de mis últimos versos: ¿ habéis dejado de existir, mientras leíais arrepentidos la historia de vuestras propias vidas?