Mientras disfruta de sus vacaciones de Semana Santa, el inspector de policía Gabriel Almansa recibe de sus superiores una inquietante petición: debe presentarse con urgencia en la Comandancia de la Guardia Civil de Algeciras.
Sin más explicaciones al respecto, deberá prepararse mentalmente para, una vez más, anteponer su vida laboral frente a la familiar, justo en el momento en que esta parecía volver a la ansiada normalidad.
Tras cumplir con la petición, la Guardia Civil notifica al inspector Almansa que el cadáver de una joven indocumentada ha sido hallado, con signos de violencia, en una playa de la localidad de Tarifa. La única pista para su identificación es una enigmática inscripción que la mujer fallecida tiene escrita en su brazo derecho.
Tomando la investigación como algo personal, Almansa formará tándem con el sargento de la Guardia Civil Antonio Fajardo, un tipo peculiar que, sin ser del sur, sabe exprimir a fondo el humor andaluz. Ambos, codo con codo, harán derroche de su mejor instinto policial y de su astucia para intentar desentrañar un caso muy enrevesado, plagado de interrogantes y que, a la postre, solo será la punta de un iceberg, en el que bajo la superficie se ocultan los enfermizos poderes de la mente humana, esos por los que algunas personas no son prisioneras de su destino, sino de su propia mente.
Las sonrisas del azul es una intensa novela policiaca que es mucho más que un relato de intriga, en la que el hilo conductor es la lucha del protagonista para encontrar un equilibrio razonable entre su absorbente profesión y su complicada vida familiar. Esto la convierte en una interesante narración intimista y emocional.