Una pareja de enamorados decide irse a vivir juntos y formar una gran familia. Muy pronto, se ven hundidos en la miseria, y la matriarca se ve obligada a agudizar su ingenio y deciden comenzar a elaborar caramelos artesanales para poder sacar a los hijos adelante. Más tarde, le propone a su cuñado, un buen hombre, unirse como socio, para sacar adelante la pequeña fábrica. Con la buena gestión del socio, tienen varios años productivos. Solo que la egoísta mujer, al repartir las ganancias, como habían acordado, se niega y termina matando de un golpe a su cuñado. Todo se trunca tras la muerte del socio, la conciencia le pasa factura y termina hundida en la desdicha y la culpa, más la decepción de los hijos, ya que ninguno pudo ser feliz y terminan pagando, cada uno de Los Morado, sus errores.