La reina Ketania reinaba en la lejana galaxia Elenya, que estaba formada por trece planetas. Era una reina buena, con poderes mágicos extraordinarios y que conseguía la paz y armonía entre todos, incluido el planeta, además de tener el control de los quanntunoides, habitantes androides del planeta Quanntu.
Ketania cayó gravemente enferma, y antes de que su enemigo Runquinaz atacase a Sundero, se fue lejos de ellos, ya que sin sus poderes sería una guerra sangrienta. La esperanza de Sundero recayó en la pequeña princesa Marcialinda, ella poseía el Rembloc real, al ser la primogénita de la reina nació con él. Al igual que su madre Marcialinda, también tuvo que huir ante el eminente ataque de Runquinaz, que se había hecho con el control de los androides de Quanntu y que había convencido a los jefes de otros de los planetas.
Marcialinda llegó a La Tierra, un planeta elegido por el señor Mawy, que sabía que en la Tierra se adaptaría enseguida y podía defenderse perfectamente.
Marcialinda, nada más llegar, tuvo que utilizar sus poderes mágicos, comprobó que cuanto más la utilizaban más fuerte se hacían, e incluso usar algunos que ni siquiera sabía que tenía.
Uno de sus poderes era poder mutarse con apariencia humana, necesario para que nadie supiese su verdadero origen.
Conoció a Claudia, se hicieron inseparables, y Marcialinda estuvo a punto de morir al salvar a Dove, la hermanita pequeña de Claudia.
A partir de ahí, Claudia conoció su secreto, no era terrestre, y emprendieron grandes aventuras.