El espíritu irrespetuoso de la vanguardia estética y vital, el poder liberador de la imagen poética, el asombro ante lo desconocido y la sensación de entusiasmo frente a un mundo diferente, derivados innegablemente del creacionismo en la poesía de Beatriz Saavedra, existen vívidamente en un escenario que nunca es lo que parece. Detrás del falaz aplomo de su verso se encubre otro mundo más turbulento donde los ímpetus buscan los silencios, y donde la quietud pugna por existir en cualquier espacio – de nuevo y de forma siempre perdurable- habitan los ímpetus del desconocimiento que le han infundido sentido a la humanidad desde el principio.
Memoria de la muerte y sus mitologías es un libro en que la búsqueda es complemento natural de la ausencia, donde la delicia poética resonante sólo puede conferir acentos avistados y de sentido vivaz que el autor, sensualmente, nos inscribe para descubrir ese límite imaginario que es la muerte en sus demarcaciones subjetivas.