Misandria repasa la humanidad desde sus orígenes poniendo de manifiesto que la violencia más cruel no es exclusiva de la testosterona.
Tenemos toda una colección de asesinas de hombres que matan a sus víctimas exclusivamente por razón de género, desde reinas todopoderosas que travisten a su harén masculino a viejecitas que crean asociaciones criminales para que multitud de señoras consigan quedar viudas. Hay también filósofas ultrafeministas que plantearon la destrucción del sexo masculino como única opción para la salvación del mundo. Incluso hay casos de mujeres que, literalmente, violan a hombres por diferentes motivos a fecha de hoy.
Si bien es cierto que hay menos casos de misandria que de misoginia, es importante tenerlos en cuenta y hablar abiertamente de ello, evitando que los varones que sufran este tipo de violencia se sientan cohibidos, se avergüencen de denunciarlo o, lo que es peor, que no se les tome en serio.