Un joven nacido después de la guerra civil española en una zona rural, cuando alcanza la mayoría de edad, se da cuenta de que los estudios adquiridos en el pueblo donde ha nacido y vive no son suficientes para poder afrontar la vida con dignidad. Esto le hace reflexionar y llega a la conclusión de que su formación, tanto profesional como personal, tiene que ser más consistente. Por esta razón, el joven emprende una vida de sacrificio y superación basada en un constante aprendizaje, enriquecido por todas las experiencias, tanto positivas como negativas, que le va proporcionando la vida y que, a lo largo del tiempo, le darán una visión y un punto de vista muy particular
para enfocar los problemas y desarrollarlos hasta conseguir el éxito.