¿Quién no conoce en Tomelloso a Francisco García Pavón? ¿Quién de este país no ha leído una novela de Plinio o ha visto la serie de televisión?
Plinio es nuestro Sherlock Holmes, el más afamado policía y detective manchego, que nació de la mente del escritor Francisco García Pavón.
Pero todos los escritores tienen una infancia, y lo que nadie sabe es que Pavón, o Paquito, ya resolvía misterios en el Tomelloso de los años treinta junto con el
jefe de la Policía Municipal de Tomelloso; por ejemplo, este caso que aquí te presentamos, el primero.
El abuelo de Paquito, dueño de la carpintería El Inferno, compra una extraña mesa que pertenecía a una señora que murió sin hijos. Paquito y sus amigos Lito y Palmira descubren que la mesa guarda un gran secreto que tendrán que averiguar y que les pondrá en situaciones peligrosas.
¿Resolverán Paquito y sus amigos el caso de la mesa taraceada?
Averígualo al mismo tiempo que descubres el Tomelloso de 1930: la vendimia, la calle Independencia, la Fonda Marcelino, la Glorieta, la Plaza con el antiguo puesto de la Policía Municipal, el Casino…