Dainy y Cley, tras agobiarse por unos sucesos con sus padres en sus
respectivos hogares, huyen hacia el bosque de Kanchó en busca de tranquilidad.
Pero, cuando llegan al bosque, lo que terminan encontrando
es una intensa situación de incertidumbre. Cley y Dainy, con miedo,
corren por el bosque, hasta que acaban chocándose y conociéndose al
lado de un misterioso olivo milenario.
En ese choque, junto a Dainy y Cley, surgen unos seres de lo más curiosos.
Estos seres les acompañarán en uno de los viajes más transformadores
que experimentarán en sus vidas, un viaje lleno de vivencias y
anécdotas en el que descubrirán lo increíble y maravilloso que es vivir
siendo humano.
Las mágicas capacidades de pensar, sentir y, sobre todo, de ser conscientes
de ellas, las solemos vivir desde la superficie de sus magnitudes, pero
Cley y Dainy se sumergirán en ellas y explorarán sus profundidades