Son muchas personas las que, habiendo decidido desvincularse de la Iglesia Católica o de otras Iglesias cristianas —evangélicos, luteranos, calvinistas, anglicanos, pentecostales, etc.— quieren, sin embargo, mantener la experiencia religiosa en su vida y, en concreto, la experiencia de la espiritualidad cristiana. Jesucristo, y su mensaje espiritual, sigue siendo para ellas una fuente importante de inspiración y de orientación en las decisiones que tomen en su vida. Pero es frecuente que estas personas confundan lo esencial de la experiencia comunitaria del Cristianismo —es decir, la Iglesia— con formas concretas que ha adquirido su institucionalización a lo largo de su historia. En este libro se ofrece una descripción de lo esencial en ella, tal como se fue manifestando ya en los inicios del Cristianismo. Se comienza con la innovación interpretativa del teólogo Avery Dulles sobre la conveniencia de evitar reducir la interpretación de la Iglesia a su aspecto institucional. Este autor diferencia cinco modelos en la forma de entender qué es la Iglesia. El institucional es sólo uno de ellos. Sin embargo, la mayoría de las personas —tanto las que permanecen en la Iglesia como las que se desvincularon— tienden a desconocer los otros cuatro, es decir, caen en una simplificación reduccionista sobre el significado de lo que es la esencia de una Iglesia auténtica.