Nuestra condición humana pone de manifiesto la gran fragilidad física y emocional cuando enfrentamos los acontecimientos de nuestra vida, más aún cuando la degradación del cuerpo con todo lo que esto conlleva nos enfrenta a la cruda realidad de depender ya sea física, económica, afectiva o todas las anteriores de otro u otros que alivianen nuestra carga en la etapa de la senectud.
Es por ello que el presente libro enfoca su temática a analizar cuál es la posición del sujeto al llegar a esta etapa enfocándose en tres aspectos que, según mi análisis, influyen ampliamente no sólo en la forma como el sujeto se percibe, sino cómo impactan desde esa realidad externa y que relacionan la identidad, la productividad y la felicidad. El psicoanálisis nos brinda elementos mucho más inherentes al sujeto para analizar dichos aspectos, lo que enriquece en gran medida su contexto. Asimismo, se plantean aquellos lenitivos imperantes para salvaguardar la subjetividad y el auto respeto del sujeto entendiendo que la sociedad, las instituciones y la misma familia en interacción con la propuesta del adulto mayor, son los responsables directos de su propio estado.
Espero inspirar con la exposición del tema a muchos lectores para entender que si bien la vejez es un estado al que no podemos escapar, podemos sentar bases desde ahora para un trato más digno y un reconocimiento del valor como ser humano al adulto mayor, con lo cual tendremos un mejor futuro.