Progresión_ Un camino hacia adelante intentando no mirar atrás. El primer obstáculo en esa ruta es la dicotomía Memoria/Olvido. ¿Con cuál nos quedamos? El Olvido es la medicina que nos recetan para “curarnos” de la Memoria, pero ¿ es una solución prescindir de todo lo bello, de todo lo irrepetible que hemos vivido? ¿Todo ha de ser extirpado? No es
posible: nos quedaríamos vacíos, como un cuaderno en blanco, aunque sus páginas estén amarillentas por los años. Es una guerra de contrarios. La pieza habla de cinco mujeres quienes confluyen, como afluentes, en Valentina, la última, el gran río caudaloso que ha atravesado valles y montañas de vida para acabar ignorándose a sí misma, tratando ésta de
recordar en vano, pues su memoria ha sido desintegrada por ese Olvido terrible que, en muchas ocasiones, trae la vejez. (Carlota Luna).
El Incorrecto_ Pieza carente de hilo narrativo o argumental e inspirada en la expiación de un pasado sentimental no consumado. La componen escenas atropelladas donde dos personajes sin bautizar (X e Y) se enfrentan dialéctica y físicamente en un terreno onírico para finalizar con una suerte de harakiri. X duerme y trae a Y a su realidad („El sueño de la razón produce monstruos“) y a partir de ese momento, X expandirá retórica y sarcasmo para derrotar a Y. Éste ha de usar sus armas -más endebles- para que el exhibicionismo léxico y masoquista de X no le destruya. El verbal facing está servido. El rol del público oscila entre ser o voyeur o juez.
Conclusión: Un escaparate de la Cobardía. (El autor).